Nuestros espíritus se colman de brillos de vez en cuando
En saber sentirlos esta lo mágico…
Apareciste en el cielo sonoro de octubre
Clavando un aura alba en mí pecho
Tu luz me encegueció por un instante
Atrapándome en este conmovedor lecho de ensueño
Un silencio calido me rodeo
Entro en mi alma llenándola de amor
Mares de luz veía a mí alrededor
Sentidos condensados en un solo clamor
La emoción me estremece hasta vibrar
Escucho tu voz cargada de paz
No quiero terminar de contemplar tanta divinidad
Hasta que tú dulzura me haga delirar
Tu pulso marca mi alucinación
Señora de la eternidad
Te presencie una y mil veces antes del encuentro
Pero solo ahora siento este acercamiento
Quiero volar hasta que el candor me haga polvo estelar
Porque solo así podré vivir junto a esta irrealidad
La sincronía deja de latir
Tu mano suelta la mía, me siento otra vez en si
Pero no podré olvidar nunca tanto encanto
Porque se que estarás siempre ahí, con tu brillar sin descanso…